Nava de los Alazores por Venta El Rayo
Este recorrido parte desde el cruce que arranca desde el cruce de la autovía A92 pasada la población de Riofrío, en dirección a la Venta del Rayo. La subida en sí no es para nada exigente, teniendo un porcentaje medio del 3%. Quizá su longitud es lo más reseñable (unos 20 kms. aproximadamente), si a su dureza queremos referirnos. Lo que si es muy resaltable, es el entorno tan bonito, sobre todo desde la mitad de la ascensión en adelante, en donde la carretera se va introduciendo entre la sierra de Gibalto, y la Sierra Gorda, (repleta ésta última de aerogeneradores, por cierto, a la altura de Riofrío). Para los que estén en forma, este puerto puede ser subido a buen ritmo, utilizando desarrollos grandes, apoyado esto además, por varios descansos en todo su itinerario.
Su asfalto está en buenas condiciones, y si se puede echar en falta algo, es la ausencia de agua potable en su recorrido, aunque en la Venta del Rayo si podemos repostar. Es cierto que existen dos fuentes, pero no parecen de agua potable. Es un puerto para disfrutar, sobre todo en primavera, y otoño. En verano se hace duro, a según que horas del día, ya que carece en todo su recorrido de sombras que nos alivien del calor. Solamente, al llegar a la coronación del puerto, en la frontera entre Granada y Málaga, nos cubrirá la sombra de grandes pinos de repoblación. Este puerto enlaza directamente con la Nava de Alfarnate y Alfarnatejo, y si nos desviamos antes hacia Villanueva del Trabuco, disfrutaremos de una bajada que acompañará al nacimiento del Río Guadalhorce, en un entorno paisajístico, que quien no lo conozca, va a ser sorprendido muy gratamente.
En resumen, un puerto recomendable, para personas con inquietud cicloturista
